viernes, 27 de junio de 2014

NEO-PSICODELIA: EL RETORNO A LOS SUEÑOS

El punto de inflexión en la vuelta de la Psicodelia, deudora del mismo género nacido en los 60, tiene como base un álbum y lógicamente una banda. El disco "InnerSpeaker"(2010) nacido del enorme talento de Kevin Parker, líder de los tremendos Tame Impala, (Perth, Australia) y que completan, Dominic Simper, Jay Watson y Nick Allbrook, cuatro veinteañeros con un talento descomunal para facturar canciones de temática ensoñadora, melodías pegadizas y riffs "Zeppelianos" que enamoran y crecen en cada escucha gracias a su tejido corpulento de capas sonoras, que revitalizan por su frescura, originalidad y pegada. Temas como "Desire Be Desire Go", "Lucidity" o "Solitude Is Bliss" marcan el sonido de un gran álbum donde las melodías se funden con las guitarras, las bases rítmicas muy marca de la casa o el buen uso de los sintetizadores y que no hacen más que agrandar un sonido original, novedoso y una voz, la del mencionado Parker, resaltando en unos temas que han servido de base e influencia para otro buen número de bandas contemporáneas.

Dos años después los australianos editan "Lonerism" y hacen saltar la banca definitivamente, alabados por crítica y público, el "difícil segundo álbum de cualquiera" resulta en sus manos todo un festín de sonidos psicodélicos, melodías infalibles e irresistibles riffs que han convertido a estos temas en clásicos coetáneos a la altura de los mejores Himnos de las últimas décadas, para muestra la magnífica "Elephant" , un trallazo descomunal que bien podría pasar por el nuevo "Seven Nation Army" (The White Stripes) en cuanto a cotas de popularidad y euforia que evocan en sus conciertos, puesto que las influencias van por otros derroteros,  siendo deudores de bandas clásicas como The Beatles, Pink Floyd, Led Zeppelin o Cream o de las más actuales como The Flaming Lips. 

En total 12 temas y casi cincuenta minutos de un deleite total, en el que cada una de las canciones, los largos desarrollos instrumentales en algunos casos y las magníficas melodías antes mencionadas, hacen que "Lonerism" vaya más allá de ser reconocido como el mejor álbum de 2012, un logro que contó con la unanimidad de todo el personal, sino como uno de los mejores de los últimos tiempos. De diez

Difícil resaltar una canción por encima de las otras, aunque de hacerlo, la mencionada "Elephant", "Feels Like We Only Go Backwards", "Apocalypse Dreams" o "Nothing That Has Happened So Far Has Been Anything We Could Control", larguísimo título que contradice lo que en realidad es su música ("nada de lo que ha sucedido hasta ahora ha sido algo que pudiéramos controlar"), puesto que si hay algo que éstos chicos hacen es controlar la psicodelia como pocos.


Anteriormente a estos dos discos, y como debut discográfico, entregaron en 2008 un Ep de 6 canciones de título homónimo y en el que se adivinaba el futuro sonido de la banda con temas de una factura espléndida y en el que resaltaba especialmente "Half Full Glass Of Wine" otro de los Himnos que cautivan en sus conciertos, enloquecen al personal y forman parte ya de un repertorio que refresca e invoca al del San Francisco más colorido y ácido de otros tiempos.

LEÓN BENAVENTE: BOCADOS DE REALIDAD

                   Hacía tiempo que el mundo independiente de nuestro país venía reclamando un disco tan redondo como el primero de León Benavente, por actitud, canciones y por el discurso que defienden en las mismas. Pero quizás, antes de entrar en detalles, sería conveniente responder a una simple pregunta. ¿Quiénes son León Benavente?.

Se trata de un cuarteto de corta vida, formado por algunos de los músicos más reputados de la escena alternativa estatal, donde sobresalen por derecho propio los nombres de Abraham Boba Luis Rodríguez, ambos fieles escuderos en la trayectoria solista de Nacho Vegas, a los que en esta aventura se suma el buen hacer de los no menos importantes Edu Baos miembro de los admirados Tachenko, y César Verdú, militante en los murcianos Schwarz, banda ésta a tener muy en cuenta también.


La Euforia no acaba en su primer disco, ya que meses después de la salida de este, publicaron un EP de cuatro canciones titulado "Todos contra todos" que sigue la estela del álbum en cuanto a la redondez de sus temas y sus mensajes claros e inequívocos.


Mucha peineta en las procesiones
Bautiza esta trama ilegal
Que empiece la fiesta, que vuelen los sobres
Avanzan las negociaciones




Hechas las presentaciones pertinentes, llega el momento de hacer una defensa crítica, pero a la vez  apasionada, de su primera obra llamada de igual forma que la banda en cuestión, “León Benavente”. 

Es este uno de esos trabajos extraños, más que nada por ser disfrutable de principio a fin, de los pocos que se han facturado así en mucho tiempo, algo muy extraño en estos días, en el que la banda ha conseguido interconectar entre sí una serie de canciones colosales, por rebeldes y viscerales, a la par que intensas, vehementes y poéticas en las que se esconde la voz, el verso y un buen puñado de heridas reales, de las que duelen y siguen sangrando de cuando en cuando a pesar del paso tiempo, interpretadas por unos hombres que parecen buscar, encontrando, el himno perfecto para el devenir existencialista de una generación, la nuestra, que trata de seguir viviendo a pesar de las heridas y las trabas que se/nos im/ponen día a día. 

Esa es la sensación a la que se llega cuando entras en el perverso bucle que se crea al comenzar a sonar “Ánimo, Valiente”, con un ritmo machaconamente deudor del after-punk británico, convertida en una auténtica reivindicación personal a través de la monolítica voz de Abraham Boba, que recuerda poderosamente a Carlos Entrena de Décima Victima, quien logra sonar de lo más convincente a lo largo de todo el minutaje, demostrando que más allá del muchas veces impostado estilo vocal indie existe vida. 

A partir de ahí, las buenas noticias no hacen más que reproducirse una tras otra gracias a composiciones doloras por realistas como “Las Hienas” y “Estado Provisional”, un auténtico trallazo de pop envenenado por los cuatro costados, que es la antesala de la crepuscular “Las Ruinas”, fiel reflejo de un occidente en franca decadencia, y de la psicodelia electrónica, puro espíritu Schwarz, que encierra “La Palabra”. 

Especialmente interesante se muestra la última parte del disco por su vertiente crítica y cercana a postulados de acción directa de clara raigambre izquierdista. En esa categoría debemos incluir canciones que casi abogan por el regicidio como “El Rey Ricardo”, poniendo el dedo en la llaga sobre el último vestigio del absolutismo propio del Antiguo Régimen que supone la realeza, “Revolución”, abiertamente partidaria de un cambio, y de la curiosa “Ser Brigada”, muy cercana de nuevo al ideario de la banda de César Verdú, en la que se hacen acompañar por Cristina Martínez, guitarra y vocalista de El Columpio Asesino, suponiendo la segunda colaboración de lujo en el disco, pues un poco antes Irantzu Valencia aparece fraseando con suma delicadeza en “La Gran Desilusión”. 

Dejarse arrastrar por las canciones de León Benavente supone una agridulce prueba de fuego, puesto que lo que la banda plantea en su puesta de largo es un ejercicio musical repleto de riesgo y belleza para el que hay que estar verdaderamente preparado. Sus canciones no poseen estribillos fáciles ni edulcoran la realidad sino todo lo contrario, te ponen frente a frente con tus miedos, pesadillas, dolores y anhelos más profundos, en un intenso viaje cuyo único destino posible es el de caer irremediablemente prendado ante su propuesta. 

León Benavente En los conciertos de Radio3

Subterfurge....y otros 25 más!!!

Los pasados días 20 y 21 del Mes de Junio en Matadero Madrid serán recordados como los de la nostalgia y el recuerdo sobre todo,  hacia aquellas maravillosas bandas , que durante el Siglo pasado ( cómo suena expresado así!! ) nos hicieron descubrir y disfrutar de la música independiente hecha en nuestro país.

Bandas como Sexy Sadie,  Australian Blonde, Mercromina, Doctor Explosion, Dover, Los Fresones Rebeldes y un largo etcétera que por sí solas, y cada una con su estilo y personalidad, marcaron un antes y un después del que aún a día de hoy, otras muchas formaciones actuales se nutren.

Fue una pasada ver ( y algo único en alguno de los casos ) reuniones de éstas tan sumamente milimetradas y engrasadas que parecía como si nunca se hubieran separado, como si la maquinaria  y la química entre sus miembros aún fuera la de entonces, gracias a meses de ensayos previos, daba la impresión de estar delante de un concierto más de una gira más, de un bolo en un festival más.

Punto y a parte por el talento y la pericia mostrada, merecen  tanto Mercromina, Australian Blonde y Sexy Sadie, bandas que ya sólo existen gracias a sus enormes trabajos a lo largo de la década de los 90 y la pasada.

La banda albacetense comandada por Joaquin Pascual dio un concierto sublime, quizás por encima del resto...por qué?, porque lo tienen todo, actitud, habilidad, destreza y soltura unidas a  unos temas irresistibles amparados en un sonido electrificante, (mérito a partes iguales por la gran producción exhibida) deslumbrante, potente y a ratos fastuoso.

Atesorando tal puñado de Himnos, tales como: "Evolution", "Cacharros de Cocina", "Chaqueta de Pana", "En un Mundo tan Pequeño" y "Lo que dicta el Corazón", éstas últimas como cierre y comienzo respectivamente.

Otro de los platos fuertes del Set fue el acompañamiento a las voces de Irantzu Valencia, la inolvidable vocalista de La Buena Vida para "En un Mundo tan Pequeño" y por aquello del singular encuentro difícilmente posible en otras circunstancias.

En definitiva "The Big Steroparty" Día de La Música 2014 fue una fiesta de música, luz y color en pleno corazón de la Capital y un lujo para los más de 15.000 asistentes ( y 29 bandas ) entre las dos jornadas. Un gran sabor de boca en ambos casos, puesto que tanto una de las partes como la otra, quedaron más que satisfechas, diría que encantadas, dado el grado de regocijo vislumbrado.

Lo dicho: Subterfurge...y que pasen otros 25 años más!
Mercromina: Electricidad y ternura

Escenario

Gran asistencia de público



       Más información sobre el DDM 2014